En los últimos años se han popularizado rutinas y técnicas para hidratar y tener la piel de la mejora manera. Con la ayuda de productos de belleza y cambios en algunos aspectos de tu vida podrás llegar a mejorar tu piel de manera notable, y así evitar el envejecimiento a temprana edad.
Si bien hay cremas y cosméticos de todo tipo que te ayudan a nutrir tu cutis de la mejor manera, mejorar hábitos cotidianos de tu vida ayudarán mucho. Tener una alimentación balanceada, cuidarse de los rayos del sol, evitar o reducir los malos hábitos son algunas de las acciones que puedes comenzar a hacer para lograr el máximo esplendor de tu rostro.
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De acuerdo con la Clinica Mayo de Estados Unidos, prevenir problemas de piel y retrasar el envejecimiento natural es posible. A continuación, te presentamos cinco tipos fáciles y sencillos para cuidar tu piel y mantenerla de la mejor manera.
Actualmente, muchos de los alimentos que consumimos contienen grasas saturadas, son altos en sodio, azúcar, y no tienen un aporte nutritivo. Es por eso que hay que cuidar la nutrición con dietas equilibradas que contengan frutas, verduras, granos integrales, y proteínas magras.
Si bien la relación que hay entre alimentación y acné no está comprobada, existen algunas investigaciones y estudios que han revelado que reducir la ingesta de grasas no saludables, carbohidratos procesados, y aumentar el consumo de alimentos saludables pueden aportar a tener una piel más joven.
Estar hidratado es fundamental para el cuerpo, ya que permite que la piel se mantenga vivaz y sana. La Organización Mundial de la Salud recomienda que las personas deberían beber entre dos y tres litros de agua por día.
Actualmente, se ha notado la tendencia de reemplazar el consumo de gaseosas y jugos altos en azúcar por agua al clima, o agua con gas y zumo de limón.
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El tabaquismo es un hábito negativo que no solo afecta a tu sistema respiratorio, sino que sus efectos adversos se ven reflejados en otras partes de tu cuerpo como las uñas, la cara, o los ojos. Adicionalmente, aumenta el riesgo de contraer cáncer de pulmón u otras patologías graves para la salud.
El efecto del tabaco y otros componentes químicos disminuye el flujo de la sangre por el cuerpo, y limita el oxígeno y otros nutrientes que son fundamentales en tu salud.
El estrés y la ansiedad acumulados pueden desencadenar brotes de acné u otros problemas en cara, cuello, extremidades, y otras partes del cuerpo. El estado de ánimo sano, la calidad del sueño, el control de las emociones, entre otras cosas te pueden ayudar a tener mejores resultados.
Es indispensable utilizar protector solar para cuidar rostro, brazos y cuello de los rayos UV para evitar quemaduras y los efectos de la radiación. Todos los tipos de piel son diferentes, por lo que lo más recomendable es asistir al dermatólogo para que te indique el tipo de protector que más ayuda a tu piel.
Por: Jimmy Riaño
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