Como ya es tradición en los hogares colombianos, cada 7 de diciembre se celebra el Día de las velitas, fecha que marca el inicio de las celebraciones navideñas.
En este día, es común que miles de familias salgan a las calles en horas de la noche para encender velitas, decorar con faroles, poner música decembrina y compartir comida.
Esta actividad se ha llevado a cabo desde hace varias décadas y la festividad es celebrada en todos los pueblos y ciudades del territorio nacional. No obstante, aunque se sabe que se trata de una festividad religiosa, muchos no conocen con exactitud lo que dice la biblia sobre esta celebración.
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¿Qué dice la biblia sobre la celebración del Día de las velitas?
El origen religioso del Día de las velitas está relacionado con un pasaje de la biblia protagonizado por la Virgen María y el Arcángel Gabriel. Allí, se narra el momento en que el Arcángel se presenta ante María para comunicarle que será la madre de Jesús.
Esta escena se cuenta en los versículos 26 al 31, del capítulo 1 del Evangelio de Lucas. La tradición del Día de las velitas busca conmemorar la inmaculada concepción de la Virgen María y recordar uno de los momentos más importantes narrados en la Biblia.
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Así es el texto que contienen los versículos:
“Al sexto mes, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, en donde se encontraba una virgen desposada con un varón que se llamaba José de la casa de David, su nombre era María, y entrando el ángel a donde ella estaba, dijo: ‘¡Salve, muy favorecida! El Señor está contigo; bendita tú entre las mujeres’
‘María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. Y he aquí, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre: Jesús’”, se puede leer en el texto sagrado.
¿Cuándo empezó la tradición del Día de las velitas en Colombia?
Esta tradición empezó cuando el papa Pío IX proclamó el 8 de diciembre como el Día de la Virgen María y pidió que creyentes de todo el mundo encendieran velas en la madrugada de este día y la noche del día anterior para conmemorar la inmaculada concepción.
En Colombia, país donde predomina la religión católica, esta tradición se ha mantenido hasta la actualidad.
