Carolina Cruz es una de las mujeres más destacadas y admiradas de los últimos tiempos en nuestro país, su carisma y nobleza la han catapultado al mundo de la fama convirtiéndose en una de las mejores presentadoras. La vallecaucana se dio a conocer con tan solo 20 años en concursos de belleza y desde ahí emprendió su camino.
En una reciente entrega de su pódcast ‘Mi mundo, mis huellas, mi verdad’, Cruz habló de uno de los temas más aclamados por sus seguidores, toda su experiencia relacionada con el reinado Nacional de Belleza, que tal y como lo confesó no era algo que estaba buscando, sino que llegó a su vida, pues ni siquiera se le cruzaba por la cabeza el hecho de ser modelo o presentadora.
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La mujer reveló que en sus planes estaba irse por carreras como veterinaria o la arquitectura, ya que eran temas que le llamaban la atención.
“Nunca soñé con ser reina. Nunca soñé con ser modelo. Mucho menos con ser presentadora, empresaria y hacer lo que hago hoy en día. Nunca me imaginé que fueran a existir las redes sociales (…) Nunca pensé tampoco ser comunicadora social, porque tampoco terminé mi carrera, algo de lo cual también me arrepiento“, confesó Cruz.
Cruz reveló que inicio en el modelaje en la ciudad de Cali en diferentes eventos en centros comerciales, donde tan solo ganaba $50.ooo pesos que eran invertidos para su ropa y hasta para hacerse cargo de su familia.
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Ahí empecé a ganarme mi plática. En ese momento por cada desfile cuando tenía 16 o 17 años me pagaban 50.000 pesos y yo me sentía archimillonaria y me acuerdo de que iba y compraba camiseticas que decían ‘Azuquitar’. Abrí mi primera cuenta de ahorros, pero también decidí desde mis 17 años hacerme cargo de mi familia“, contó.
Asimismo, la presentadora reveló cómo llegó al certamen de belleza y aseguró que fue mientras vivía en ‘La Flora’, al norte de Cali, a sus 17 años, donde acostumbraba a salir descalza, jugar y ayudar a su mamá con los mandados.
Uno de sus momentos favoritos era salir a comprar el pan sobre las 4 de la tarde. Allí la vio una persona que trabajaba para el reinado del Valle diciéndole que era la indicada para participar. Sin embargo, ella por su corta edad no quiso entrar al certamen, solo hasta los 19 la convencieron y fue allí cuando decidió hacerse una cirugía plástica; a los 20 años ingresó al concurso.
“Uno está muy chiquito, muy inmaduro. Entonces llegué con un cirujano plástico, te encuentran muchas cositas para mejorar en tu cuerpo y uno es muy inseguro (…) No tiene como esa fortaleza, además era una niña de 19 años (…) Me hice una lipoescultura y me mandé a agrandar las puchecas y me operé la nariz“, contó.
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A su vez, agrego: “De frustración y de no entender por qué no había ganado. Si todo el mundo me estaba diciendo que favorita (…) A no entender qué me había faltado (…) Ese día tengo que aceptar que me dio durísimo, lloré toda la noche. Todas salieron a rumbear y yo me quedé en el cuarto, a comerme un cheesecake grande porque había hecho dieta todo el año (…) Era una niña, chiquita. No entendía nada“.
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