Lo que poco se conoce, es que las plantas que por esencia tienen fragancias agradables tienen como función ahuyentar y minimizar la presencia de insectos en el entorno, e incluso, algunas de ellas favorecen significativamente a la disminución del estrés, dando un entorno de tranquilidad y frescura. Cada planta tiene cuidados completamente diferentes para su duración y posible floración.
Esta es una de las opciones más comunes y de uso frecuente cuando se quiere que la casa huela delicioso. El aroma que esta planta desprende se distribuye por cada rincón de tu hogar, y su facilidad de cultivo la convierte en la planta ideal para tener en los interiores. Asimismo, la lavanda es muy utilizada en la perfumería moderna y actual, pues gracias a sus notas florales, aromáticas de frescura y toques amaderados, pero sutiles, hacen que su intensidad sea inconfundible.
La lavanda tuvo auge durante los siglos XVII y XVIII, cuando los guanteros y perfumistas adoptaron esta planta para darle un aroma agradable al cuero que usaban para sus elaboraciones; se cree que al ayudarlos a liberar el olor, estos le recomendaban a las personas que llevaran consigo ramas de lavanda para mitigar el olor y para liberarse de la peste.
Es importante que la lavanda tenga buenos baños de sol al día, así que si tienes la posibilidad de ponerla en una terraza, balcón, patio o un lugar en donde caiga la luz del sol, estaría perfecto. Ten presente que esta planta no debe superar los 40 cm de diámetro, y que, aunque no necesita tanta atención, solo tienes que encargarte de darle un buen riego y procurar que no se encharque.
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Es una planta a la que le gusta la luz y el sol directo, como también disfruta de temperaturas cálidas y frescas; colocarla en un espacio que tenga luz directa y sea abierto para que se refresque, ayudará a que tu geranio se mantenga.
En la industria de la perfumería, el olor del jazmín se ha convertido en uno de los más apetecidos y utilizados. La planta tiene unas flores blancas que poseen un aroma dulce y cautivador que, incluso se intensifica durante el atardecer.
Al ser una planta de climas cálidos, el jazmín necesita una alta dosis de luz solar y tiene la plena capacidad de sobrevivir en el frío, pero si esta temperatura es frecuente lo ideal es que cubras sus raíces con algún acolchado para jardinería y así, ella mantendrá su calor sin importar el frío exterior. Ubícalo en un lugar en el que pueda tener luz y a la vez un poco de protección de fuertes fríos.
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Esta especie es proveniente de Asia, África y Oceanía, y con el tiempo se distribuyó por el resto del mundo. La gardenia es conocida por tener un aroma que crea un equilibrio entre lo cremoso y dulce, pero a su vez siendo amaderada y floral.
Es indispensable que coloques esta planta en un lugar donde no exista una alta ni directa de luz de sol; las gardenias se conforman con un ambiente cálido y húmedo, por esto, puedes poner bajo ella un plato o bandeja con piedras alrededor y agua. Por otro lado, para conservarla debes regarla regularmente, teniendo presente que esta no debe contener cal.