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Son días en los que las iglesias hacen diferentes actividades donde se recuerda la llegada de Jesús a Jerusalén, la Última Cena, su muerte y resurrección hasta el Domingo de Pascuas. Según las creencias religiosas, hay varias cosas que no se deberían de hacer, pero no es secreto que muchos aprovechan que son días festivos, para viajar y pasar tiempo en familia.
Al ser días de reflexión, respeto y sacrificios como acto de agradecimiento al hombre que murió por la humanidad, hay varias actividades que recomiendan no hacer en días puntuales.
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No vestir de rojo: este punto es de los más tradicionales, ya que se considera estar de luto durante la también llamada Semana Mayor. Además, el color está relacionado con Satanás.
No clavar clavos: estos representan el sufrimiento de Jesús en la cruz, así que omitirlos durante jueves y viernes santo es la tradición.
No casarse: usualmente no es permitido en iglesias ya que se centran en conmemorar la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Sobre todo, el viernes y sábado.
No comer carne roja: es una abstinencia con la que se compromete el creyente de no ingerir carne durante días de vigilia, o sea, los Miércoles de Ceniza, los viernes de cuaresma, jueves y viernes santo. Esto en honra a Jesús, quien duró 40 días sin comer, ni beber nada.
No barrer: tradicionalmente se dice que no se puede barrer el viernes porque esto significaría “limpiar la cara de Cristo”.
No bañarse: se cree que el viernes es mejor no bañarse porque el agua es impura ya que Jesús murió y no hay nadie que bendiga el agua, de ahí los mitos de que ni se nada es posible convertirse en sirena o pescado.