Por ello, cada vez son más las personas que integran a sus mascotas en actividades cotidianas e incluso duermen con ellas.
Numerosos estudios señalan los beneficios emocionales que tiene contar con una mascota, entre ellos la reducción del estrés, la mejor del autoestima, puede aliviar la depresión por medio de las rutinas, así como proporcionar sentimiento de felicidad gracias a la liberación de la oxitocina, conocida como la hormona del amor.
Sin embargo, una de las preguntas que tienen los dueños de mascotas es la de cómo equilibrar la vida en pareja y el cuidado de sus mascotas. Especialmente, si es bueno que el perro o el gato estén en la habitación.
Mira también: Mascotas Bésame: ¿Cómo debemos actuar cuando vemos casos de maltrato animal?
Según una encuesta internacional registrada por El Confidencial, cerca del 50% de los dueños de perros aseguran que duermen con ellos o lo han hecho en algún momento.
Como toda práctica tiene puntos a favor y en contra, entre los beneficios se encuentra el fortalecimiento del vínculo afectivo con tu ‘peludito’, así como la sensación de bienestar. Por otro lado, quienes se oponen señalan las repercusiones en la higiene y la transmisión de algunas enfermedades.
Frente a este panorama, muchas parejas se pueden enfrentar a la decisión de sacar o no a sus mascotas durante el acto sexual. Los expertos señalan que no es recomendable tener relaciones frente a la mascota por motivos relacionados con la ansiedad de los animales.
La psicóloga y sexóloga, Arola Poch, recomienda que no hay nada durante el acto que pueda interrumpir el deseo, “como sería el caso de una mascota”.
Los perros y los gatos pueden reaccionar ante la situación gracias a los olores, sonidos y otros elementos que se ven involucrados, por lo que “pueden hacernos perder la concentración y que nos sintamos incómodos”, explicó la especialista.
Te puede interesar: Mascotas Bésame: ¿Cómo identificar la temperatura corporal de nuestras mascotas?
A su vez, Enrique Solís, educador canino, indicó que la situación puede generar estrés en los animales al ver que una persona toma su lugar en la cama. “Los saltos, aullidos o ladridos pueden ser su llamada de atención en un episodio de estrés”, sostuvo.
MÁS SOBRE: