Durante una entrevista, confesó que tuvo una adolescencia tardía, además, debido a los largos procesos de adopción por los que pasó fue cayendo en el alcoholismo, del que solo pudo salir cuando decidió internarse en una clínica de rehabilitación a los 28 años de edad.
“Tuve que levantar la mano y pedir ayuda porque estaba ya en un camino de excesos y de una muerte lenta inconsciente, pero algo dentro me decía: ‘este no eres tú, esto no es por aquí’, pero me duró hasta los 28 años ahí fue cuando levanté la mano y pedía ayuda (…) Me fui y me interné a una clínica”, expresaba el actor.
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Ochman aseguró que cuando era tan solo un niño se le cruzó una cerveza y desde entonces tuvo fuertes problemas para dejar de consumir alcohol.
De igual forma, mencionó que durante su infancia fue adoptado en varias ocasiones y primero tuvo el apellido Sánchez, después fue adoptado nuevamente y a los 11 años le dieron el apellido Ochmann. Además, confesó que nunca conoció a sus padres biológicos y este también fue un factor fuerte en su infancia.