Estas conductas en los infantes surgen porque en situaciones se enojan, se frustran o se sienten tristes, según las emociones, lo cual genera en ellos pataletas incontrolables.
Te puede interesar: CHAYANNE PRESENTA A SU FAMILIA EN REDES SOCIALES
Sin embargo, algunos expertos aseguran que existe una técnica muy fácil para controlar estos comportamientos que, en muchas ocasiones, son molestos y se salen de control.
Cuando un niño esté a punto de tener una rabieta, frustración o tristeza, el adulto se debe agachar, mirarlo a los ojos y preguntarle de manera muy tranquila: ¿tienes un problema pequeño, mediano o grande? Esto pegunta hará que el pequeño se tome un tiempo para analizar la situación, comunicarla y dejarla pasar”, señaló la especialista en pedología infantil.
Mira también: ¿CÓMO DETECTAR SI SUFRE DE UN TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO?
Además, el sitio web Being The Parent, especializado en estos temas, asegura que, tener una actitud empática y tranquila en las rabietas de los más niños crea en estos lazos inquebrantables de confianza y mejorar la comunicación.
Por último, los padres deben resolver la respuesta qué les hicieron a sus pequeños al iniciar la pataleta; esta respuesta debe hacerle entender al niño que lo único que necesita es dejar de sentirse enojado, frustrado o triste.