Los resultados muestran que la humanidad ha engordado seis kilos por persona y que más del 55% de este incremento se debe al sobrepeso y la obesidad en las zonas rurales. En algunos países pobres o de ingresos medianos, este porcentaje llega al 80%. El epidemiólogo Majid Ezzati dice: “En los países de altos ingresos, en realidad es más fácil, en muchos aspectos, comer de manera saludable en las ciudades, porque hay alimentos frescos disponibles y quizá más baratos, y también hay más instalaciones deportivas”.
Tomado de elpais.com