El gagging cosiste en generar arcadas, casi el vómito mediante sexo oral para provocarle placer al hombre, mientras el “porno venganza” se trata de difundir fotos y videos de las niñas como un castigo por haber comenzado su vida sexual. Por otro lado está el hecho de los vídeos porno, hechos por hombres para hombres donde, con el internet, los niños desde los 11 años ven como se trata a la mujer como un objeto con el que se tiene que ser cruel. Así que tenga mucho cuidado porque si cree que tiene el control sobre los aparatos tecnológicos de sus hijos, ellos tiene compañeros que sí les pueden mostrar todo un mundo de prácticas.
Tomado de elpais.com