Elegir mal el calzado es sinónimo de daños en la postura y en su estabilidad al caminar, incluso pueden estar más expuestos a las caídas si el calzado no posee el soporte suficiente.
¿Qué debe tomar en cuenta a la hora de realizar la compra?
Se recomienda que sea cuero, ya que es un material natural que evita la sudoración excesiva, el mal olor y previene al estudiante de bacterias y hongos.
Además, es un material duradero con cierto grado de elasticidad, por lo que el rango de movilidad es mayor y los estudiantes pueden llegar a sentirlo como una segunda piel.
Lo más recomendable es que los padres adquieran calzado con suela cosida y antideslizante para evitar accidentes.
El estudiante debe ir a probarse los zapatos con medias y ponerse de pie, para probar su peso en ambos pies.
Es muy importante que quede un espacio de medio centímetro y un centímetro entre el dedo más largo del pie y la punta del calzado.
Además, se recomienda que las compras se realicen en la tarde porque es cuando los pies están en su máxima forma de expansión.
Antes de realizar el pago se debe revisar cada una de las costuras internas y externas del zapato, para evitar rozaduras con la piel o para la garantía.