La pequeña bebé aparentemente nació enojada, según lo demuestra una sesión de fotos que le tomaron sus padres para ver a la niña sonreír, pero esto nunca ocurrió.
Es por esto que, en las fotografías Luna se muestra con el ceño fruncido, la boca cerrada y los labios apretados, mostrando una aparente molestia, ya sea con las fotos, sus padres o alguno de sus pensamientos.
Siempre me pregunto cuándo están tan despiertos: ¿Qué están pensando exactamente? ¿Le encanta o no te gusta?, señaló Christian Musa, el padre de Luna.
Lo más hermoso de la historia es que sus padres y familiares, desde que nació Luna, no han parado de reír con su peculiar forma de ser.
Estas son algunas fotografías de la pequeña tierna, pero enojada Luna: