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¡Cuidado con el amor violento!
En el amor, la vida en pareja o familia no supone estar sujetos al yugo de la agresión, bajo ninguna circunstancia vos tenés que pasar tus días sujeto a estructuras de violencia a cualquier nivel.
Así que si estás en una relación en la que experimentas de forma continua, constante, creciente cosas cómo estas mucho cuidado.
- Optas por callar, para evitar discusiones.
- Tenés miedo a las reacciones de tu pareja.
- Tu vida social cada vez es más pequeña pues tu pareja tiene conflictos con todos.
- Has modificado tu forma de vestir y ser en función de lo que te dice tu pareja.
- No te sentís libre para tomar decisiones respecto a tus procesos personales.
- Tu individualidad esta sujeta a la supervisión de tu pareja.
- Cuando hay una situación complicada, tu pareja se impone, grita, inválida y descalifica tu posición.
- Cuando tu pareja no está el ambiente es sereno, cuando tu pareja está el ambiente es tenso.
- Cuidado, si hay celos o control progresivos, esto no es admisible.
- Tu pareja únicamente le gusta las cosas a su estilo, a su modo y en su momento.
- Pierde el control de forma verbal.
- Hay oportunidades en las que pierde el control y usa la violencia física.
- Vos vivís con miedo.
- No respeta tu “no” sexual.
- Hay que complacer a tu pareja en todo, en caso contrario todo es un problema.
- Las cosas tienen que ser ya, cuando tu pareja se impone.
Si estas conductas, por mencionar solo algunas, forman parte del tu día a día en la relación, tenés que darte a la tarea de buscar ayuda ya, es urgente.
Vivir esclavos de la violencia es un sinsentido en el amor.
Dr. Rafael Ramos.